İZMİR (Turkish Daily News) Los bosques a lo largo de las costas del Mediterráneo y el Egeo están siendo reducidas a cenizas a causa de la frecuencia e intensidad de los incendios. Con el aumento del calentamiento global, los incendios forestales se han convertido en uno de los principales desastres naturales en la costa occidental y Sur de Turquía. Aunque las autoridades tratan de prevenir los incendios, el número de fuegos sigue incrementándose.
Aparte de destruir miles de hectáreas de tierras de cultivo y forestales, los incendios han acabado con la vida de muchas especies animales en las áreas boscosas. Los últimos incendios en el Egeo y el Mediterráneo que han afectado a Gödence, Alaçatı, Çeşme Dalyan, Özbek Köyaltı, Uzunkuyu village, Alaçatı Karaköy, Urla Çeşmealtı, Marmaris, Alanya y Bodrum demuestran la seriedad y delicadeza de la situación. Otros fuegos se han declarado en los distritos de Menemen, Menderes, Selçuk, y Foça, en la ciudad portuaria de İzmir, en el Mar Egeo.
En Turquía, los incendios forestales son comunes en las regiones del Egeo y el Mediterráneo. La primera serie de incendios comienza en los secos meses de verano. Los bosques están especialmente en riesgo en julio, agosto y septiembre. El incremento de las temperaturas y la temprana llegada de la primavera están provocando incendios forestales de mayor frecuencia e intensidad. La sequía también dispara el número de incendios. El impacto de la sequía, que es ciertamente una de las principales consecuencias del calentamiento global, juega un importante papel como causante de los incendios.
El noventa por ciento de los incendios forestales de Turquía comienzan a lo largo de los 1.700 kilómetros de línea costera, comenzando en Kahramanmaraş y siguiendo todo el camino hasta Istanbul, incluyendo la región mediterránea y del Egeo. El número de incendios forestales en Turquía desde 1937 se sitúa en 68.000. Según los datos el 14 por ciento de los incendios forestales se generaron deliberadamente, mientras que el 35 por ciento se debieron a negligencias.
Los esfuerzos del ministerio continúan. Las autoridades no sólo proporcionan más equipamiento para acabar con los incendios, sino que también enseñan a los ciudadanos a prevenir y extinguir el fuego. Si bien el incremento de temperaturas y las negligencias influyen mucho en los incendios forestales, algunos consideran seriamente la posibilidad de sabotajes. El Ministro de Medioambiente y Silvicultura, Osman Pepe, exige que las áreas quemadas sean reforestadas inmediatamente; sin embargo, los ciudadanos siguen preocupados.
Cifras en aumento
Osman Pepe ha relacionado este incremento del número de incendios con las condiciones meteorológicas adversas. Indicó que en los últimos 20 años, de 1986 a 2006, 11.773 hectáreas de bosques quedaron reducidas a cenizas cada año. Aunque el número de incendios descendió desde 2001, hubo un incremento a partir de 2006. Las estadísticas revelan que el número de incendios forestales creció en 2007 comparado con 2006. Mientras que el número de incendios forestales fue de 1.530 en 2005, hubo 2.227 incendios en 2007.
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