"Cerrar las puertas a Turquía traerá inestabilidad a la UE", afirma el embajador sueco en Ankara

ANTEP (TURQUÍA)

Cerrar las puertas de Europa a Turquía o a cualquier otro país que trate de alcanzar los estándares europeos podría conducir a la incomunicación y a la inestabilidad no sólo en esos países sino en la Unión Europea, según afirmó el embajador sueco en Ankara, Christer Asp, que asistió el lunes en la ciudad suroriental de Gaziantep a un foro titulado "Turquía y el proceso de adhesión a la UE".

En declaraciones hechas en el foro, Asp, como representante en Turquía del país que ostenta hasta diciembre la presidencia semestral de la UE -y uno de los más firmes defensores del ingreso de Turquía en el bloque de los 27-, subrayó la importancia que tiene para cualquier país tomar la decisión de integrarse en la Unión Europea, con todas las transformaciones políticas, económicas y sociales que ello implica. "Como potencial miembro de la UE, Turquía no perderá nada de su identidad turca y seguirá siendo Turquía. Sin embargo, se convertirá en un país que comparta los mismos valores éticos en un gran grupo de naciones que comparten los mismos valores y la misma visión", afirmó el embajador.

La presidencia sueca de la UE cree que Turquía incrementará sus esfuerzos para unirse a la UE este año, algo que Suecia valoraría muy positivamente. "Se trata de un paso importante para el desarrollo del país. Por esta razón, la pertenencia de Turquía a la UE debe ser debatida en profundidad y entendida como necesaria", declaró Asp.

"La Unión Europea ha sido criticada por no ser tan fuerte políticamente como lo es en el aspecto económico. Creo que la UE necesita a Turquía para cambiar esta debilidad; de hecho, Turquía es ahora mismo el segundo mayor socio estratégico de la UE", señaló el embajador sueco en Ankara.

Asp no quiso sin embargo pintar un camino de rosas a Turquía, consciente de las dificultades y obstáculos que anteponen varios países miembros. El embajador dijo que los países candidatos a ingresar a la UE siempre han encontrado resistencia por parte de los países ya miembros, pero animó también a Turquía a afrontar esa lucha por hacer valer su candidatura, por otro lado tan necesaria para la UE. "Si la Unión Europea siguiera constando de sólo seis países fundadores... ¿tendría la imagen o el poder que tiene actualmente?", se preguntó Asp para resaltar la importancia de la ampliación y el hecho de que siempre ha habido resistencias al cambio, especialmente en Europa.

"Si Turquía no se convierte en miembro de la Unión Europea, la próxima generación jamás nos perdonará", sentenció el embajador sueco.