Hoy termina el plazo de presentación de ofertas para la construcción de la primera central nuclear turca.
ANKARA
La policía turca detuvo ayer martes a 37 activistas anti-nucleares en el transcurso de una protesta pacífica contra el proceso iniciado por el gobierno turco para la construcción de la primera central nuclear del país, según informó la organización ecologista Greenpeace.
Korol Diker, responsable de Energía de Greenpeace en Turquía, declaró que la policía interrumpió la protesta que se estaba realizando frente al ministerio de energía turco en Ankara y detuvo a varios de los activistas de varios grupos ambientales que se estaban manifestando frente a la sede gubernamental. Los manifestantes portaban pancartas en las que se leían eslóganes contra la energía nuclear, y varios de ellos se postraron en el suelo con trajes negros que simulaban esqueletos para llamar la atención sobre los peligros de las centrales nucleares.
Las protestas se produjeron un día antes del fin del plazo para que las empresas interesadas presentaran proyectos para la construcción de la primera central nuclear turca, que estará ubicada cerca de Mersin, en la costa mediterránea de Turquía. El gobierno turco tiene previsto construir una segunda central nuclear más adelante, que estará situada cerca de Sinop, en el Mar Negro.
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