El CHP califica la visita del presidente turco de "inaceptable", mientras que el MHP la considera un grave error.
ANKARA
Los partidos de la oposición ha elevado sus críticas después de que el Presidente turco Abdullah Gül confirmara que acudiría ayer sábado a Yerevan para asistir al encuentro de clasificación que enfrentaba a las selecciones de fútbol de Turquía y Armenia, calificando la visita de Gül de "inaceptable".
"Queremos que las relaciones con Armenia mejoren, pero resulta inaceptable que como gran país tengamos una postura tan sumisa frente a la grave hostilidad por parte de Armenia", dijo el líder del CHP (principal partido de la oposición en el Parlamento de Turquía) Deniz Baykal en declaraciones al canal de televisión NTV realizadas el viernes. "Esta no es una política seria. Este es sólo otro ejemplo de las inconsistencias que vemos en los actos del gobierno" añadió.
Gül anunció el pasado miércoles que tras largas deliberaciones finalmente acudiría durante una visita de un día de duración al partido en Armenia, al que había sido previamente invitado por su homólogo armenio el presidente Sarksyan. Si bien en general la sociedad turca, así como los EE.UU. y la UE, han acogido bien esta iniaciativa con Armenia -con la que Turquía no tiene relaciones diplomáticas desde 1993- la oposición laica y nacionalista la critican por considerar que Armenia no ha cambiado ni sus demandas internacionales contra Turquía respecto a la exigencia del reconocimiento del llamado 'genocidio armenio' ni su política exterior agresiva, especialmente con el vecino Azerbaiyán, donde la ocupación del enclave azerí del Alto Karabaj por parte de las fuerzas armenias a principios de los 90 causó la ruptura de relaciones diplomáticas con Ankara, aliada del gobierno azerbaiyano.
Por su parte el primer ministro turco, Recep Tayyip Erdoğan, rechazó como exageradas las críticas esgrimidas por Baykal, quien llegó a sugerir que el presidente turco había visitado el monumento a las víctimas del genocidio armenio que existe en la capital armenia, Yerevan. "Esto es lo que Baykal hace todo el tiempo, construir su política sobre aspectos negativos", dijo Erdoğan.
El nacionalista MHP, tercer partido en el Parlamento Turco en cuanto a número de escaños, criticó igualmente la visita calificándola de un grave error. También un pequeño grupo de seguidores del minoritario Partido de los Trabajadores (İP) -un partido laico ultranacionalista cuyos líderes están implicados en la red Ergenekon- se reunió frente a la sede de la presidencia el viernes acusando al presidente Gül de haber actuado contra los intereses nacionales de Turquía y cediendo a la presión de Estados Unidos.
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