Un Chelsea superior perdonó en Turquía y el Fenerbahçe amplió su racha en casa para la Champions con una victoria a favor por 2-1. Deivid en propia puerta adelantó a los ingleses, pero en la segunda parte Kazim y el propio Deivid, con un golazo, dieron la vuelta al resultado y dejan todo pendiente para Stamford Bridge la semana que viene. 51.000 espectadores turcos abarrotaron el Şükrü Saraçoğlu en Istanbul.
TURQUÍA (agencias)
El equipo turco venció a un Chelsea que durante prácticamente todo el partido fué un sólido castillo defensivo, con una calidad individual y táctica en principio superior a la del Fenerbahçe. El técnico israelí del Chelsea, Avram Grant, dispuso a sus jugadores de una manera diferente a la habitual, con un 4-1-4-1 y con el marfileño Didier Drogba solo en la punta. La táctica era mantener a la línea del centro del campo ligeramente adelantada para evitar impedir la construcción del juego al Fenerbahçe, un equipo que habitualmente precisa amplios espacios para elaborar sus jugadas.
El Fenerbahçe intentó a su vez ejercer su papel de anfitrión con valentía y buscó irse hacia arriba sin amilanarse ante su rival, chocando una vez tras otra con la muralla defensiva de los londinenses, que utilizaban un marcaje individual. Aun así el Fenerbahçe se mostró sereno, controlando las bolas altas y con un Volkan atento a cualquier peligro.
Pero en un centro corto al área del francés del Chelsea Florent Malouda, el brasileño Deivid despejó bastante mal enviando el balón al fondo de su propia portería. En el minuto 30 llegó además la estrella marfileña Didier Drogba que, en un disparo corto, hizo que Volkan tuviese que lucirse para desviar el balón a córner. Unos minutos más tarde, otro pase largo a Drogba le dejaba sólo ante la meta turca, pero una salida a tiempo de Volkan despejando desde fuera del área, sin duda una vez más uno de los protagonistas del partido, evitó el segundo tanto del Chelsea.
El juego del Fenerbahçe ante la presión inglesa tuvo que limitarse a pases cortos hacia adelante y largos hacia atrás buscando los pocos huecos libres que los jugadores del Chelsea dejaban libres. El Fenerbahçe reclamó dos penaltis en la primera mitad, pero el árbitro danés se mostró bastante permisivo con el duro juego del Chelsea en los marcajes.
Remontada en la segunda parte
En la segunda mitad, el Fenerbahçe salió espoleado por los gritos de los 51.000 seguidores que abarrotaban el estadio, y que parecieron olvidar la decepción del gol en propia meta. No obstante, también comenzó a acusarse el cansancio de atacar incesantemente contra la fortaleza inexpugnable en la que se había convertido la defensa del Chelsea, y cada pérdida de balón era aprovechada por el Chelsea para crear peligro, bien con disparos desde todos los ángulos de Drogba o con jugadas muy bien enlazadas entre el alemán Michael Ballack, el ghanés Michael Essien y Joe Cole.Fue en una de las pocas ocasiones en que los jugadores del Fenerbahçe consiguieron despistar a la defensa del Chelsea, con un pase desde el centro del campo de Mehmet Aurelio a Colin Kazim, cuando este último logró abatir al italiano Carlo Cudicini con un tiro a media altura, empatando así el partido ante la euforia de los seguidores istanbulitas.
Los de Zico querían más y se lanzaron al ataque, consiguiendo que el Chelsea retrasara sus líneas; y la recompensa no tardó en llegar: un impresionante disparo de Deivid desde la línea de tres cuartos se coló por el lateral de la portería sin que Cudicini pudiese siquiera tocarlo, elevando el tanto al marcador turco y consiguiendo la reconciliación de Deivid con la afición.
El Fenerbahçe, que por primera vez llega a los cuartos de final de la máxima competición europea, logró así ganar a un Chelsea en principio superior, y que sin duda es un firme candidato a llevarse el título europeo. Si es que el equipo turco no vuelve a sorprenderle la próxima semana en Stamford Bridge.
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