El gobernador del Banco Central no cree que la crisis vaya a afectar demasiado a la lira, y prevé una inflación de un sólo dígito para finales de año.
ANKARA
El Gobernador del Banco Central Turco (TMB, en sus siglas en turco), Durmuş Yılmaz, presentó ayer viernes los nuevos billetes y monedas de lira turca (TL), que según señaló entrarán en circulación a partir del 1 de enero de 2009.
Yılmaz indicó que el billete más grande sería de 200 liras (unos 112 euros), mientras que el más pequeño sería de 5. Actualmente el billete de lira turca más grande es de 100 TL, mientras que el más pequeño es de sólo 1 TL. Además los billetes tendrán en un lado el retrato de Atatürk, el fundador de la moderna Turquía, mientras que en el otro habrá retratos de personajes destacados de la historia turca, según declaró Yılmaz.
El TMB eliminó seis ceros de la lira turca hace tres años con la caída de la inflación, retirando de la circulación los antiguos billetes y monedas y sustituyéndolos por la nueva lira turca (YTL). Ahora la reforma monetaria completa este segundo y último paso sustituyendo la YTL por la TL (lira turca) y retirando el término "yeni" ("nuevo", en turco) de la denominación tradicional de la moneda turca. Ambas monedas, YTL y TL, coexistirán y serán válidas durante todo el año 2009, hasta que el 1 de enero de 2010 la YTL será retirada finalmente de la circulación.
La lira turca, resistente a la inflación
Yılmaz predijo además que la presión inflacionista ejercida por la crisis financiera global tendría tan sólo un impacto mínimo en la lira turca (TL), y señaló que la inflación a finales de año se mantendría probablemente en un sólo dígito. "Mientras mantengamos políticas monetarias estrictas podremos capear fácilmente esta turbulencia, pero no verse afectado en absoluto es imposible", dijo Yılmaz, quien sin embargo añadió: "No creemos que su efecto en la moneda turca vaya a ser muy duro".
Yılmaz predijo además que la presión inflacionista ejercida por la crisis financiera global tendría tan sólo un impacto mínimo en la lira turca (TL), y señaló que la inflación a finales de año se mantendría probablemente en un sólo dígito. "Mientras mantengamos políticas monetarias estrictas podremos capear fácilmente esta turbulencia, pero no verse afectado en absoluto es imposible", dijo Yılmaz, quien sin embargo añadió: "No creemos que su efecto en la moneda turca vaya a ser muy duro"."El gobierno está determinado a mantener su lucha contra la inflación", declaró por su parte el primer ministro Erdoğan, que asistió junto con Yılmaz a la conferencia de prensa para presentar los nuevos billetes y monedas. "Continuamos manteniendo la inflación bajo control a pesar de algunos problemas internos y externos", añadió el primer ministro turco.
La estricta política monetaria mantenida por el gobierno turco desde 2002 logró que la inflación pasara del 29´7% en 2002 al 7´7% en 2005; sin embargo, las cifras no han sido tan buenas en los últimos dos años debido a diversos factores, alcanzando la tasa de inflación un 9´65% en 2006 y un 8´39% en 2007. Aunque el gobierno se había fijado un objetivo del 4% para 2008, las sacudidas de los mercados mundiales y la subida del precio del petróleo y los alimentos dispararon la inflación turca hasta un 11´7% en el mes de agosto.
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